Desde que Rusia invadió Ucrania, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, se ha mantenido alejado de sus aliados de la OTAN, manteniendo cálidas relaciones con el presidente Vladimir V. Putin, haciendo demandas a sus aliados occidentales y utilizando la diplomacia de tiempos de guerra para elevar su propia estatura.
Ahora el Kremlin lo ha socavado, al retirarse del acuerdo de granos que Erdogan ayudó a negociar, lo que elevó la estatura internacional del presidente turco y ayudó a estabilizar los precios mundiales de los alimentos. La retirada rusa se produjo pocos días después de que el líder turco se reuniera calurosamente con el presidente Biden y dijera que Ucrania “definitivamente merece ser miembro de la OTAN”, una opinión que cruza la línea roja más roja de Putin.
Los funcionarios rusos afirmaron que la decisión de retirarse del acuerdo de granos, que permitía las exportaciones ucranianas a través del Mar Negro, fue un incumplimiento del lado del acuerdo que beneficia a Rusia: la relajación de las sanciones a sus propias exportaciones agrícolas. También advirtieron que el ejército ruso consideraría cualquier buque con destino a Ucrania como un posible transportista de carga militar.
Pero otra consecuencia de la decisión fue crear otro giro en la compleja relación entre Erdogan y Putin. Los analistas dicen que los dos confiaron el uno en el otro durante la guerra.
Durante mucho tiempo han tenido vínculos estrechos, a pesar de los conflictos en Siria, Libia y otros lugares. Tras la invasión de Ucrania, Turquía mantuvo sus lazos económicos y diplomáticos con Rusia, posicionándose como el principal negociador entre Moscú, Kiev y Occidente.
El presidente de Turquía a menudo ha descrito a Putin como “mi amigo” e insistió en que todavía puede hacer que la diplomacia funcione con Rusia. El viernes, Erdogan dijo a los periodistas que Rusia quería que se mantuviera el corredor de granos, “pero tiene expectativas de los países occidentales y deben actuar”. Y dijo que discutiría el asunto con Putin por teléfono y cuando se reúnan el próximo mes.
¿Cómo frustró Erdogan a Rusia?
Después de meses de bloquear y exigir a los aliados, Erdogan aceptó este mes la candidatura de Suecia para unirse a la OTAN y en marzo retiró su objeción a que Finlandia se uniera a la alianza. Putin se ha opuesto ferozmente a cualquier expansión de la OTAN, especialmente tan cerca de suelo ruso.
“Estos han erosionado la calidad de Erdogan como intermediario confiable y honesto”, dijo la analista de política exterior turca Ilhan Uzgel. “Ahora Putin ve el acuerdo de granos como una moneda de cambio con Occidente, sin involucrar a Erdogan”.
Los analistas han sugerido que los recientes gestos de acercamiento de Erdogan hacia Occidente podrían haber irritado a Putin. Este mes, Turquía recibió al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky y envió a cinco comandantes del regimiento ucraniano Azov de regreso a Ucrania, lo que llevó a Rusia a acusar a Turquía de romper un acuerdo para mantener a los hombres allí hasta el final de la guerra.
Rusia bombardeó las ciudades portuarias de Ucrania durante tres días esta semana, en particular contra las instalaciones de transporte de granos, y advirtió que los intentos de romper su bloqueo naval en el Mar Negro podrían verse como un acto de guerra.
Los ataques rusos pueden indicar que el Kremlin no quiere que se reviva el acuerdo de granos, ni que se use como base para conversaciones de paz o de alto el fuego, según Serhat Guvenc, profesor de relaciones internacionales en la Universidad Kadir Has. Dijo que la violencia también podría indicar que Erdogan ha perdido parte de su prestigio diplomático.
“Pero eso no significa que Erdogan se haya vuelto diplomáticamente irrelevante”, agregó Guvenc.
Erdogan ha servido como línea de comunicación entre Putin y los líderes europeos y estadounidenses, y Turquía y Rusia se han beneficiado económicamente durante los últimos 17 meses de guerra.
Turquía se ha negado a imponer sanciones a Rusia como lo han hecho Estados Unidos y la Unión Europea, dijo Guvenc. Ante sus propios problemas económicos, Turquía ha ampliado sus relaciones comerciales con Rusia desde el comienzo de la guerra, aumentando las exportaciones turcas y comprando gas natural ruso a bajo precio. Y mantener buenas relaciones con Moscú, dicen los analistas, ayuda a Erdogan a mantener un equilibrio de poder en el Mar Negro.
¿Puede Turquía recuperar influencia?
Si quiere desempeñar un papel de mediador en las conversaciones de paz o de alto el fuego, o simplemente recuperar algo de influencia, Erdogan simplemente necesita encontrar otra oportunidad, dijo Guvenc.
Y Turquía sigue siendo importante para los aliados de la OTAN y otras instituciones occidentales debido a la relación continua de Erdogan con Putin, dijo Evren Balta, profesor de relaciones internacionales en la Universidad Ozyegin en Estambul.
El acuerdo de granos podría revivir, dijo, y Erdogan podría encontrar nuevas oportunidades de negociación en poco tiempo.
La Sra. Balta agregó que Rusia y Turquía tienen similitudes fundamentales en la forma en que operan sus gobiernos, incluida la toma de decisiones basada en las necesidades del momento.
Dijo que si Putin necesitaba hablar con Erdogan, lo haría. Si necesitaba condenarlo, también lo haría. Y ambas partes entienden la naturaleza dual de esta relación, agregó, lo que significa que “Putin y Erdogan seguirán hablando”.
