Los socialistas aragoneses celebran estos martes en el centro de la campaña europea en Zaragoza. Un acto que no puede ser contactado por la presencia de Pedro Sánchez, y por una demostración por su parte de su relación con Javier Lambén, ni de la candidata Teresa Ribera, que, en un cambio de agenda, se desplazó a Alicante y sustituyó a Aragón por Pilar. . Alegra.
«Es marciano, no lo entendemos», según los de las líneas independientes, que afrontaron con resignación las decisiones tomadas de De Ferraz desde que decidió actuar de muto propio y desobedecer las riendas de la dirección general. Oficialmente, dice el PSOE «problemas de calendario» de la actual ministra de Transición Ecológica y ha trasladado que Teresa Ribera vendió a doña Adelante a Aragón para que desempeñara el papel de otros actos de campaña. Sin embargo, es un acto de menor alcance, que se acecha en un paseo ciudadano o en una reunión sectorial.
La presencia de Pilar Alegra Mientras tanto se ha pronosticado y anunciado, pero no es el protagonista del mismo. Sin embargo, este cambio de aviones convierte al puerto gubernamental en una de las principales funciones del evento.
Pese a todo, los milicianos fueron convocados al Jardín de Invierno del Parque Grande, donde también intervinieron la candidata aragonesa, Rosa Serrano y Javier Lambón. Un encuentro cargado de morbo, gracias a que el líder del partido Aragón asegura que «la milicia está tan humillada» por Pedro Sánchez al anunciar el nombre de Serrano.
Serrano, que actualmente ocupa un puesto en el Senado junto a Lambén y está afín a la dirección nacional, logró ocupar el puesto decimoctavo de las listas de los europeos por el momento, reuniendo un 2% de los apoyos en una votación interna. Una decisión sorprendente, porque la otra candidata, Isabel García, obtuvo 1.736 votos (89,67%) y tenía una amplia experiencia como europea.
«Isabel García tiene una excelente parlamentaria europea, pero Ferraz le imputa un candidato con la espalda del centro de apoyo. La explicación del Madrid y ella se indigna«, expresa Javier Lambén sobre los viajes de X.
Sin embargo, desde el PSOE-Aragán son conscientes de que «no nos queda más que aceptar la situación y decir todo en la misma dirección». Como, dice, «una vez iniciada la campaña, no estamos de acuerdo en que estemos peleando entre nosotros», de modo que todos parecen indicar que en el acto se genera un ambiente distendido entre ambos.
Con esta acción, el PSOE se quitó todo el picadillo de guerra, al menos del momento, entre las distintas políticas protagonizadas por Lambén en las últimas semanas, quien, en sus últimos meses al frente del partido (anunció que era su último mandato), se asoció en torno a su figura de varios líderes socialistas opuestos al sánchismo, como Felipe González, Alfonso Guerra o Emiliano García-Page.